Hola,
Hace poco que nos conocemos, aunque parezca que seamos amigas de toda la vida.
A veces, mientras caminas hacia adelante en la vida, conoces y descubres cosas y personas que te llaman la atención por diversos motivos, o simplemente sabes que son distintos a ti, en todo, en como piensan, como visten, como se ríen, como responden ante las mismas situaciones que tú...
Como ya he dicho, no conozco todos los detalles de tu vida; Pero creo que deberías estar orgullosa de todo lo que has conseguido a lo largo de los años, lo que has mejorado, todo aquello que has aprendido de los demás y todo lo que hayas podido ofrecer a la gente con la que te has ido encontrando. Deberías estar orgullosa de estar en está maravillosa clase y de haber tenido la oportunidad de que gente como yo te hayamos conocido. De que, ahora, seas parte de nuestras vidas y por ello compartas un poquito de ti con todos. Un poquito de tus sonrisas mañaneras, esa empatía por los problemas de los demás, las ganas de tragarte 2 horas de transporte público para hacernos fotos estúpidas en clase, esa cálida voz que me grabas siempre, tu disposición al anteponer a los demás antes que a ti, la belleza que dejas traslucir a través de algunas de tus capas superficiales, tu firmeza a la hora de defender tu opinión, tu cariño y tu amor diario hacia él, tu preocupación por lo que puedan pensar los demás, tu devoción por el debate... y muchas cualidades más que sé que están siempre a mi alrededor aunque tú no creas tenerlas.
Por ello, no debes sentirte mal nunca, evita los pensamientos negativos, sabes quién eres y qué tienes que hacer en cada momento. Y cuando dudes, cierra los ojos, y recuerda. Todas las decisiones que tomes están en tus manos, y son tuyas. De nadie más. Eso es lo que te hará especial respecto al resto. Él sabe que le quieres, y que siempre vas a ser su "amiga" cuando necesite hablar, y su novia cuando necesite algunos mimos, y que vas a ser su Carolina para cualquier cosa que quiera hacer contigo, aunque sólo sea colarte en sus sueños. Quiérete, si tú no fueses como eres, él no sería como es y probablemente yo no estaría escribiendo esto.
Y sí, entiendo que la vida sea dura, la vida está hecha para cometer errores, perder buenas oportunidades, llorar, reír, conocer gente nueva, perder seres queridos, aborrecer asignaturas... La vida es ese periodo que debemos vivir siempre de la manera que más feliz nos haga. ¿ Por qué sino, para que vivir algo que no es vida para nosotros?
Amiga mía, con todo esto te quiero decir que no dejes de ser quién eres nunca. Que siempre que eches la mirada hacia el pasado estés orgullosa de lo que ha pasado, todos esos pequeños errores y esas decisiones te han traído aquí hoy. A mi lado. Y que no podría estar más contenta de haberte conocido, no creo mucho en el destino ni en las casualidades, pero creo que tú has sido una de ellas. Y me hace muy feliz pensar que ya formo parte de ti, y evolucionaremos juntas hasta gobernar la Tierra. Porque eres una superheroína C.
Espero solemnemente, que siempre que te encuentres baja de ánimos, recurras a mi, o leas mis versos. Siempre te identificarás con alguno de ellos. Porque tanto tú como yo, somos humanas y nos parecemos en ambas facultades.
Te quiero mucho,
María Sanjuanbenito Sanagustín
martes, 4 de noviembre de 2014
jueves, 18 de septiembre de 2014
El viaje que me cambió.
Indistintamente de dónde procedamos, todos necesitamos sentirnos arropados y familiares en algún momento de nuestras vidas. Por ese motivo, os recomiendo que si ahora mismo os sentís solos y desolados obteis por realizar una experiencia maravillosa que he hecho este verano.
El camino de Santiago.
En este camino, aprendí muchísimas cosas. Tales que hoy por hoy nadie aprecia en la sociedad. Gracias a esta experiencia cambié mi forma de ser en tan sólo quince días, recorrimos 265 km a pie con makuto incluido, mi promoción de 2º de Bachillerato. Esa con la que había convivido doce años, algunos más maravillosos que otros, pero ellos son, mi gran familia.
En un breve resumen de todo lo que viví, sentí y aprendí, destacaré lo que creo que es más importante para todos. Para que esta sociedad reaccione ante los desequilibrios que se producen a diario en el mundo, y por los que deberían estar realmente agradecidos. Lecciones básicas, que harán que todos seamos más felices y nos sintamos mejor respecto de los demás.
QUINCE DÍAS, QUINCE ETAPAS, QUE CAMBIARON MI FORMA DE VER LA VIDA:
Al principio, como a todos, nos ilusiona la idea de poder hacer un camino así, todos juntos. Un buen recuerdo...pero, nunca nos paramos a pensar todos los sacrificios y todo lo nuevo que podemos descubrir sobre el lugar donde vivimos.
Yo, llevaba mi propio makuto, unos 10 kilos aproximadamente. Parecerá mucho, pero todo depende de la voluntad que tengas. Mi makuto fue mi compañero de viaje, el que me mostró todas las cosas que nunca hago porque me las hacen otros, me enseño que los sacrificios tienen su recompensa, pero no sólo a nivel material, sino moral.
Hubo días que nos queríamos desvanecer y no avanzar más, días en los que nos faltó la nieve para tener las cuatro estaciones, días en los que cada paso nos acercaba más a Santiago.
Es totalmente un reto de superación, pero eso sí, agradable según lo mires. Es un reto en el que muchas veces te encontrabas solo, porque ibas a otro ritmo, o bien porque querías ir solo, y pensar. Pensar a la vez que aumentaba la altitud, te costaba más respirar, hacía más frío o a la vez que disfrutabas de un Bierzo maravilloso. A veces, sufríamos de calor, del deseo de que apareciese una fuente, un río o un simple charco en el que refrescarnos. Como por ejemplo, aquél interminable día que nos subimos el puerto entero, y cuando pensábamos que habíamos llegado a Ponferrada, aún nos quedaban 10 kilómetros. Pero aquellas piscinas naturales nos salvaron de la muerte.
Para mi cada día que pasaba, enfrentándonos a las adversidades, los dolores, las ampollas, el peso en la espalda, la soledad... era maravilloso.
Es realmente una representación del esfuerzo que le dedicamos a aquello que nos gusta, y sobretodo, que cuando queremos algo, hacemos lo posible por lograrlo. Para mí, es la metáfora de la vida, y estaría encantada de poder repetirlo desde más lejos. Para tener una mayor capacidad de superación frente a los problemas del día a día.
Pero como todo, este camino tuvo muchas más cosas que sacrificios. Lo mejor fue toda la gente a la que pude conocer de verdad. La gente que conocí allí era distinta a la idea que tenía de algunos de ellos. Convivir doce años con las mismas personas no quiere decir que los conozcas. Ni mucho menos que vayan a ser siempre iguales.
En este camino cree nuevas amistades, fortalecí otras, hablé y caminé con personas con las que creía que nunca hablaría, encontré buenas intenciones...
Descubrí que hay personas que se esconden bajo una realidad a la cual no se parecen, por los estereotipos. Personas maravillosas que me acompañaron.
Sin embargo, también conocí a otras personas externas, hubo una etapa en la que me perdí. Me entró un miedo terrible porque no veía a nadie de mi grupo, llovía, no llevaba batería y no sabía el nombre del pueblo en el que pararíamos. Pero unas chicas alemanas me recogieron e hicieron el camino a mi lado hasta que encontré al resto. En todo este rato, hablamos y compartimos ideas y sensaciones. Íbamos bastante a la par y prometimos vernos al llegar a Santiago.
La esencia de este camino no es sólo hacerlo con aquellas personas con las que vayas, sino disfrutar de la variedad, conocer gente distinta, caerte, curar a otros, ir de bar en bar sellando la credencial, dar masajes a tus amigos, escuchar, observar la naturaleza, reflexionar sobre todo lo que te preocupe, preguntar, reír...porque todo ello sólo se vive en el momento, y las probabilidades de encontrarte con la misma gente son bastante nulas. Por ello, aprovechar cada momento que viváis, porque os cambiará de alguna manera.
Además, no hace falta ser creyente para hacer este camino. Basta con ser capaz de respetarse a uno mismo y de tener fuerza de voluntad por descubrir esta nueva visión. Ser capaz de conocerse a sí mismo, validando aquello que podemos y que no podemos hacer. Es un camino de reflexión y de placer. Y aquellos que lo hagáis lo disfrutaréis. Y por supuesto, surgirán muchos momentos alegres o tristes que os servirán como experiencias y qué utilizareis en el día a día o para echaros unas risas con los amigos.
Por ejemplo, cuando descubráis el "Eau de caca de Channel", ese hedor a caca de vaca y pasto mojado que os entrará por todas partes. Y que cuando os vayáis echaréis de menos.
O el mero hecho de dormir en el suelo, ducharte, si tienes suerte, con agua helada o hirviendo, comer un bocadillo de algo que no te guste durante tres días, reventarte las ampollas al andar... comenzaréis a apreciar más lo que tenéis.
En mi camino, dormí cuatro días creo en cama, y os aseguro que cuando nos tocaba cama era como lo más excitante de la noche.
...
María Sanjuanbenito Sanagustín
El camino de Santiago.
En este camino, aprendí muchísimas cosas. Tales que hoy por hoy nadie aprecia en la sociedad. Gracias a esta experiencia cambié mi forma de ser en tan sólo quince días, recorrimos 265 km a pie con makuto incluido, mi promoción de 2º de Bachillerato. Esa con la que había convivido doce años, algunos más maravillosos que otros, pero ellos son, mi gran familia.
En un breve resumen de todo lo que viví, sentí y aprendí, destacaré lo que creo que es más importante para todos. Para que esta sociedad reaccione ante los desequilibrios que se producen a diario en el mundo, y por los que deberían estar realmente agradecidos. Lecciones básicas, que harán que todos seamos más felices y nos sintamos mejor respecto de los demás.
QUINCE DÍAS, QUINCE ETAPAS, QUE CAMBIARON MI FORMA DE VER LA VIDA:
Al principio, como a todos, nos ilusiona la idea de poder hacer un camino así, todos juntos. Un buen recuerdo...pero, nunca nos paramos a pensar todos los sacrificios y todo lo nuevo que podemos descubrir sobre el lugar donde vivimos.
Yo, llevaba mi propio makuto, unos 10 kilos aproximadamente. Parecerá mucho, pero todo depende de la voluntad que tengas. Mi makuto fue mi compañero de viaje, el que me mostró todas las cosas que nunca hago porque me las hacen otros, me enseño que los sacrificios tienen su recompensa, pero no sólo a nivel material, sino moral.
Hubo días que nos queríamos desvanecer y no avanzar más, días en los que nos faltó la nieve para tener las cuatro estaciones, días en los que cada paso nos acercaba más a Santiago.
Es totalmente un reto de superación, pero eso sí, agradable según lo mires. Es un reto en el que muchas veces te encontrabas solo, porque ibas a otro ritmo, o bien porque querías ir solo, y pensar. Pensar a la vez que aumentaba la altitud, te costaba más respirar, hacía más frío o a la vez que disfrutabas de un Bierzo maravilloso. A veces, sufríamos de calor, del deseo de que apareciese una fuente, un río o un simple charco en el que refrescarnos. Como por ejemplo, aquél interminable día que nos subimos el puerto entero, y cuando pensábamos que habíamos llegado a Ponferrada, aún nos quedaban 10 kilómetros. Pero aquellas piscinas naturales nos salvaron de la muerte.
Para mi cada día que pasaba, enfrentándonos a las adversidades, los dolores, las ampollas, el peso en la espalda, la soledad... era maravilloso.
Es realmente una representación del esfuerzo que le dedicamos a aquello que nos gusta, y sobretodo, que cuando queremos algo, hacemos lo posible por lograrlo. Para mí, es la metáfora de la vida, y estaría encantada de poder repetirlo desde más lejos. Para tener una mayor capacidad de superación frente a los problemas del día a día.
Pero como todo, este camino tuvo muchas más cosas que sacrificios. Lo mejor fue toda la gente a la que pude conocer de verdad. La gente que conocí allí era distinta a la idea que tenía de algunos de ellos. Convivir doce años con las mismas personas no quiere decir que los conozcas. Ni mucho menos que vayan a ser siempre iguales.
En este camino cree nuevas amistades, fortalecí otras, hablé y caminé con personas con las que creía que nunca hablaría, encontré buenas intenciones...
Descubrí que hay personas que se esconden bajo una realidad a la cual no se parecen, por los estereotipos. Personas maravillosas que me acompañaron.
Sin embargo, también conocí a otras personas externas, hubo una etapa en la que me perdí. Me entró un miedo terrible porque no veía a nadie de mi grupo, llovía, no llevaba batería y no sabía el nombre del pueblo en el que pararíamos. Pero unas chicas alemanas me recogieron e hicieron el camino a mi lado hasta que encontré al resto. En todo este rato, hablamos y compartimos ideas y sensaciones. Íbamos bastante a la par y prometimos vernos al llegar a Santiago.
La esencia de este camino no es sólo hacerlo con aquellas personas con las que vayas, sino disfrutar de la variedad, conocer gente distinta, caerte, curar a otros, ir de bar en bar sellando la credencial, dar masajes a tus amigos, escuchar, observar la naturaleza, reflexionar sobre todo lo que te preocupe, preguntar, reír...porque todo ello sólo se vive en el momento, y las probabilidades de encontrarte con la misma gente son bastante nulas. Por ello, aprovechar cada momento que viváis, porque os cambiará de alguna manera.
Además, no hace falta ser creyente para hacer este camino. Basta con ser capaz de respetarse a uno mismo y de tener fuerza de voluntad por descubrir esta nueva visión. Ser capaz de conocerse a sí mismo, validando aquello que podemos y que no podemos hacer. Es un camino de reflexión y de placer. Y aquellos que lo hagáis lo disfrutaréis. Y por supuesto, surgirán muchos momentos alegres o tristes que os servirán como experiencias y qué utilizareis en el día a día o para echaros unas risas con los amigos.
Por ejemplo, cuando descubráis el "Eau de caca de Channel", ese hedor a caca de vaca y pasto mojado que os entrará por todas partes. Y que cuando os vayáis echaréis de menos.
O el mero hecho de dormir en el suelo, ducharte, si tienes suerte, con agua helada o hirviendo, comer un bocadillo de algo que no te guste durante tres días, reventarte las ampollas al andar... comenzaréis a apreciar más lo que tenéis.
En mi camino, dormí cuatro días creo en cama, y os aseguro que cuando nos tocaba cama era como lo más excitante de la noche.
...
María Sanjuanbenito Sanagustín
viernes, 4 de julio de 2014
Devoción
Para mi querida
amiga Ana, que siempre mantiene ese optimismo en la vida que tanto me inspira
para ser alguien mejor.
Quizás este sea mi adiós… se repetían una y otra vez aquellas
palabras en mi cabeza… ¿Por qué, las personas son tan crueles? ¿Por qué nos
valoran según los estereotipos? ¿Por qué tengo ese extraño sentimiento de
ausencia cuando te vas? ¿Por qué motivo existen tantas preguntas que no tienen
respuesta?
Sus ojos grises, perpetuos al silencio…evocando un cielo entumecido por sus lágrimas, esperando un insinuante roce que entrelace nuestros dedos…Maldita, se ha mordido el labio… ¿estará enfadada, se habrá aturdido…? De pronto, una pequeña gota de agua limpia desciende por su mejilla desenfrenadamente…Sus ojos grises desaparecen entre el dulce oleaje inhibiendo su cian…
Su mano, se ha cerrado en un enorme puño que esconde entre las piernas…siento su ira, siento su agonía…aún puedo notar sus caricias y sus besos recorriendo mi cuello, sus dedos entre los míos, sus susurros de madrugada…aún puedo verle meciéndome entre sus brazos…
Quiero volver al pasado, no quiero perderla, no quiero olvidarla, no quiero soñar si no está ella para colarse en mis sueños…soy un imbécil; no debiste; no quise hacerlo, fue aquella copa, yo no quería…yo sólo sé que la quiero…no te vayas aún por favor; pero díselo; ella no quiere oírme, ella ya no me quiere; claro que te quiere, el amor no es un juego, no es fácil olvidar; aunque quisiese, mis palabras son escoria, ni el viento se las quiere llevar…
Yo sé que le quiero, ¿Él me quiere verdad? Pues claro que te quiere tonta, ¿acaso crees que un despiste lo ha cambiado todo?
-Si mis ojos te llaman, mira primero.
María Sanjuanbenito
María Sanjuanbenito
¿Eres tú, AMOR?
Sus
ojos negros, perpetuos al silencio…
una
comunicación adversa,
quizá
hoy sea el día…
y
sus palabras, el pensamiento…
Mirada
gélida,
Profunda
como océanos inacabados…
inexplorados…,
indecisos y profundos…
¡Ay!...
Si tus ojos me llaman
pero
quiero advertirte…
si
te llevas mi alma,
¡llévate
el resto!
La
sonrisa se desvanece
sólo
queda la sombra seria y dudosa…y
de
pronto otro gesto, inusual
su
mano es un puño…
sus
ojos destellan furia y pasión
y
mis palabras…su eco…
¡llévate
el resto!
Rayos
encierran el eco en sus oídos
ni
yo misma sé lo que significan
mis
palabras…no puedo pensar,
su
mirada aturde mis sentimientos…
piensa,
piensa… ¿AMOR? ...
-¿eres
tú?
-¡insolente!
Si
vienes del aire
si
envuelves el alma
la
capa de tu postrera
baña
de luto
la
sed del amante
¿eres
tú amor?
si
te llevas mi alma,
¡llévate
el resto!
¡que
ya no lo quiero!
Que
sólo me quedo
Bordado
en seda un pañuelo
Que
empape las olas de mi mar eterno
Y
vierta sus aguas
En
profundos ojos negros
De
océanos inacabados
Inocentes
e inexpertos
María Sanjuanbenito Sanagustín
lunes, 30 de junio de 2014
Tu ser, tu estar
Está tintada mi mirada
de las lágrimas del cielo
y se marcha el sol con recelo
donde reposa la noche postrada
Van surgiendo en manada,
¡Ay! Señero de tu velo
Muestras ahora tu celo
Por aquella que brillaba
Ya tus ojos reaparecen
Dando paso a la luz de Helios
Que entre sombras se mecen
Y sus sollozos nimios
Al son de tus caricias
muestran tus ósculos ígneos
María Sanjuanbenito Sanagustín
Generación de 1996
Esto no es el fin, solo ha sido uno de los mejores paseos
que he podido realizar a lo largo de mi vida. Y ya no hablo solo de esta
increíble etapa: Bachillerato, sino de este camino por todo el colegio. He
recorrido más aulas y he tenido más profesores que nadie.
He sido tan afortunada de tener esta maravillosa oportunidad
y de poder haberla vivido de tan grandiosa manera. Me gustaría ser capaz de
expresar mediante sencillas palabras mi aprecio, mi cariño, mi ilusión y mil
sentimientos más de felicidad que soy incapaz de guardarlos en mi corazón y no
compartirlos. Literalmente, habéis conseguido que irradie felicidad allá donde
mire.
Podría dedicarle hojas y hojas a esta experiencia, hablando
de cientos de excursiones y actividades que han hecho de mí una persona más
segura y sociable. Pero, quiero centrarme en lo que he obtenido de todos
vosotros a lo largo de mi vida escolar, sí, de todos. Incluso aquellos que solo
me abrieron la puerta una vez, que me dijeron que me callase por el pasillo o
tan sólo que me saludaron y me sonrieron al verme. Porque amigos míos, sois
todos muy valiosos y deberíais estar muy orgullosos de ello, porque sin vuestro
esfuerzo diario yo no sería quien soy ahora.
De todas formas, quiero hacer un pequeño recopilatorio de
los grandes momentos desde que fui aceptada en este colegio con tan solo 5
años.
Toda esta historia comenzó cuando yo gritaba y lloraba por
no querer entrar al colegio, qué tiempos aquellos…cuando era más tímida que nada
en este mundo. Y la verdad, he de agradecerle mucho trabajo a uno de mis
mejores tutores, Juanjo. Eres muy grande, y créeme que debes de ser un padre
estupendo, porque para mí prácticamente lo fuiste. Ya sé que debió de ser un
duro camino intentar tratar con alguien como yo a esa edad y que en algún
momento debisteis de desesperaros para que me sociabilizara… pero, os agradezco
de corazón que no tiraseis la toalla, porque mírame ahora, que soberbia que
soy. También, habéis sido muy importantes para mi Inmaculada en tercero, Merche
en cuarto y Maribel en quinto y sexto. Recuerdo muchas cosas buenas y malas de
vosotras, pero bueno, no somos perfectos. Aun así, Inmaculada tu serenidad y tu
disciplina me han enseñado y me han salvado de varios castigos. Merche, me
enseñaste a amar muchas cosas y entre ellas se podría decir que la lectura. Y
Maribel, después de tantísimos años seguías acordándote de mí y te aprecio con
locura por todo lo que hiciste en Valencia para que intentase encajar y no
estar sola, porque siempre que necesitaba a alguien con quien hablar tú me ofrecías
tu tiempo. Y sobre todo, porque después de seis años sin apenas verte, ahí
estabas, en mi graduación.
Ya después de unos añitos conseguí pasar a la ESO, con
alguna que otra dificultad en las matemáticas. Primer curso: Ahí estaba yo con
mi alegría de ser ya una preadolescente y de poder tener la autoridad para
vestirme y conjuntarme yo solita. Con una gran sonrisa arcaica que iba de un lado a otro, con muchas ganas de empezar mis
clases de laboratorio. Un mundo nuevo y científico dispuesto a ser conocido.
Sin duda, en mi vida personal, esta fue la etapa más dura y
en la que más aprendí. No hizo falta una segunda lección, porque supuso algo
muy duro en algunos casos para mi persona. A lo largo de estos años pasé por
muchos pasillos, taquillas que nunca llegamos
a tener, laboratorios en los que diseccionar corazones, clases sucias de
tiza…un mundo diferente y más cercano a la madurez.
Debería hablar de una gran cantidad de cosas en esta etapa,
pero como no se trata de aburriros ni mucho menos me remitiré a lo esencial.
Belén, tú fuiste la precursora de que haya sido siempre una amante de las
ciencias a pesar de mis muchas dificultades con los MRU y MRUA de física, los
cuaternarios de Sofía, los fosfolípidos de Amit, que haya cursado Ciencias
Sociales… tú y yo sabremos siempre que en mi interior hay una científica que
nunca se marchará. Que durante mucho tiempo (hasta mediados de segundo de
Bachillerato) ha mantenido su sueño por estudiar bioquímica y ser totalmente
diferente a los demás.
Respecto a otras materias; Iván, Pablo, Bruce… cuantas horas
me habréis dedicado a recogerme redacciones, oraciones de sintaxis, ejercicios
de matemáticas. Iván, tu conseguiste que empezase a redactar los famosos
comentarios de texto por los que apruebo la mayoría de mis exámenes de lengua,
a buscar ese detallismo por la perfección, los niveles, en vez de escribir sin
pensar. Pablo, tu plasmaste la alegría en mi cuando después de tantos años
descubrí que las matemáticas se sacaban con práctica, madre mía, ese día
descubrí que me gustaban, y fue la primera vez que aprobé por mi propio
esfuerzo. Bruce, me enseñaste que los idiomas son algo importante, y que es una
delicia hablar con otras personas creando un salad bowl / mix-culture. Un poquito más a delante descubrí a
Javier, las clases que más me gustaban de todas. La flauta, el piano, sólo el
mero hecho de tocar el himno de la alegría todos juntos, me encantaba. Aunque
nunca llegue a leer mucho las notas de una partitura (porque me aprendía de
memoria como había que tocar) hiciste un grandísimo trabajo con nosotros, y en especial con esta escritora. También, no podemos
olvidarnos de Gerardo y del Hermano Teófilo. Grandes profesores de historia,
cada uno con su método, pero ambos inteligentísimos. Hermano, me acordaré
siempre de sus documentales del canal de Historia que aborrecíamos pero que en
el fondo nos ayudaban a recordar mejor los conceptos. Y Hermano Gerardo, de
usted no olvidaré los exámenes de cincuenta preguntas, la lectura en voz alta
de aquel libro del muchacho que viajaba de época y vivía los acontecimientos
que tocaban.
Por fin, llegamos a tercero y cuarto de la ESO. Bienvenidos
a todos, este ciclo estuvimos con Javier Acero, otro amante de la Geología que
me mostro lo bonito que puede ser el grafito, o como se forma un diamante de
forma natural. Estos años tuvimos con nosotros a nuevos profesores, Amelia,
Sergio, Esther…cada uno con sus cosas. Amelia con su afán de contarnos sus
historias, sabemos que era para que aprendiésemos de la vida; Sergio, con sus
reflexiones de la mañana, que no faltase ningún día una frase que te hiciese
reflexionar y Esther, tenías una forma peculiar de dar clase, pero recuerdo la
huella que dejaste al final de curso con mi sabiduría sobre la aorta.
Otros sin embargo, llevaban aquí ya muchos años. Amit, mi
buen tutor, preocupado al máximo por mis problemas personales, el profeta de
los fosfolípidos y de los compuestos del laboratorio. Otro más que despertó mi
espíritu científico. Gracias por apoyarme siempre, y ya sabes a que me refiero.
Loli, siempre me acordaré de tus pirámides poblacionales y del libro que nos
leías todos los días de aquel chico que venía de un país totalmente fuera del
mundo desarrollado al nuestro. No sabes, de cuantos sustos me he salvado en
Geografía. Doris, una amante incondicional de la historia, gracias por hacer
que las clases fuesen tan entretenidas siempre, y por aquellas ayuditas que nos
ofrecías. Así daba gusto dar la II Guerra Mundial o incluso el Antiguo Régimen.
Alicia, por ti siento algo distinto a todos los demás. Has sido tutora,
profesora de lengua, profesora del taller y en algunos casos amiga. Gracias a
ti, he desarrollado esta habilidad o don por la escritura, sobretodo de
carácter poético. Has hecho, a pesar de tachar tantos textos, de mí una gran
persona. No he llegado al punto de Bécquer ni de Valle- Inclán, pero cada día
que escribo me siento mejor. Y es la mejor manera que tengo para describir lo
que siento en cada momento. Gracias a ti, he creído en mi misma y, ahora sé,
que soy capaz de cualquier cosa. En el ámbito escolar, me ayudaste muchísimo en
tercero, aquel año que pensé que repetiría. No entendía el porqué de tan malas
notas, pero finalmente conseguí lograr lo imposible.
Aun me acuerdo de cuando os pedí que no me aprobaseis
ninguna asignatura que estuviese por debajo del cinco, que quería tener la
satisfacción de saber que me las había sacado porque había sacado la nota
necesaria.
Y bueno, podría hablar de más profesores, equipos como el de
Amador, MªJosé y Ana, Mar, el Hermano José… Hermano José, aunque ya no
pertenezca al colegio, nunca abandonará mi vida. Las reflexiones de aquellas
películas eran tan profundas que conseguían arrancarnos varias lágrimas. Son
parte de mi empatía, de mi optimismo por vivir la vida y hacer feliz a los que
me rodean. Y sus esfuerzos porque nos aprendiésemos de una vez la lista de
papas.
¡Cielos! Si ya estamos aquí, todos juntos en Bachillerato:
Queridos alumnos, sois oficialmente parte de este colegio y por eso os hemos
concedido estas insignias por acabar la Educación Secundaria Obligatoria. Ahora
es vuestra decisión, continuar este camino con nosotros hasta Selectividad o
dejarnos. Es hora de que maduréis, y os deis cuenta de lo afortunados que sois.
De que ayudéis a los que más lo necesiten, estén a miles de kilómetros o a tan
solo dos pasos. Y sobre todo, es hora de que os deis cuenta de que lo que
hagáis perjudicará únicamente en vosotros y vuestras calificaciones. Os
esperamos en el próximo curso.
Bienvenidos a este nuevo curso, profesores y alumnos. La
excitación de la casi mayoría de edad y de la nueva aventura recorre mi cuerpo
como la adrenalina antes de un concierto.
Esta etapa, sin duda ha sido la más valiosa, posiblemente en
la que más haya aprendido de la vida, de datos que puede que no me sirvan nunca
y de mi misma. Este camino está comprendido entre las deliciosas clases de Eva
hasta la pregunta retórica de Benito ¿Lo habéis entendido, sí o no?
Aquí, quiero detenerme con más detallismo. Son los que me
habéis creado una personalidad muy rica de cultura.
Comencemos con primero de Bachillerato, Buenas noches Eva,
fuiste mi inspiración con mis matemáticas. Fue la primera vez que sentí que
podía sacar buenas notas en esta asignatura. Y así fue, un nueve precioso en el
primer examen. Aunque tuve algún desliz durante el curso, yo sé que sabías que
me encantaban tus clases, y que esos errores me hacían más fuerte y
trabajadora. Hasta tal punto, que me obsesione con las funciones y los límites
y logré resolver 415 ejercicios en un mes. Soy infalible trabajando gracias a
ti.
Luis,
más que un profesor de lengua has sido mi instructor personal, nos enseñaste a
distinguir entre amor para y amor por, a fijarnos en los verdaderos regalos de
la vida, en que todos los problemas tienen una solución según el punto de
vista. A sentirnos orgullosos de nuestro Quijote,… cuantos fragmentos pudimos
llegar a comentar de él. A confiar en nosotros mismos. Y claro está, lengua y
literatura. Hermano José, nuestro profesor de Filosofía favorito. Nos contó
grandes hazañas de Santo Tomás de Aquino y de San Agustín. Hermano Manuel, pese
a las distintas formas que tengamos de vivir la cristiandad, usted siempre
respetó mi visión y apreció mis argumentaciones sobre el porqué de ellos. Mª
Jesús, sé que sufrías mucho estrés por culpa de nuestra clase de inglés, tal
vez no fuésemos los mejores de todos. Pero siempre apreciaremos el trabajo que
hacías cada tarde por nosotros, y en especial por corregirme las cientos de essays
opinions, letters, advantadges and drawbacks
que pude entregarte en un año. Y por los comentarios positivos que escribías
siempre en ellas. Me apasiona que valoren mi trabajo.
Ángel, aunque digan que Educación Física no es dura, yo
aprendí un montón; Para mantenerme en forma a lo largo de los días, de cara a
mi afición con el mountainbike o tan sólo para correr un buen test de Cooper y
desahogarme del estrés. Eres un valiente del deporte. José Luis, fuiste un gran
tutor, que me enseñaste a no aprenderme los contenidos de historia de memoria,
sino a profundizarlos y entenderlos. Algo que me ha sido de gran ayuda en los
afamados Globales II de segundo. Una “maravilla” personificada en una hoja de
examen. Y bueno, enlazando con segundo. Jose Luis, me has enseñado muchas cosas
a cerca de la Geografía Física, económica, de la población… quien iba a decir
que acabaría sacándome el curso con buenas notas cuando no le había cogido el
“tranquillo” a las litologías. Las cosas llegarán tarde, pero llegan mediante esfuerzo
y trabajo. Adolfo, he de admitir que al principio no fuiste uno de mis
profesores queridos. Pero cierto es, que según han pasado los días, meses, años
me he dado cuenta de que lo único que has querido siempre es ser justo con
nosotros y enseñarnos lo duro que es conseguir un 9,4 en tu asignatura. La
importancia que tiene saber hablar en público, tener conocimiento y capacidad
para expresarse como debe ser. Que si me suspendías era para que viese mis
fallos y fuese a por lo máximo. Y así ha sido, espero habértelo demostrado a lo
largo de todo este tiempo. Este año deseaba que llegasen tus clases, salir a
hacer una noticia, levantar la mano y tan sólo responder correctamente. Benito,
tus esfuerzos para que no pareciésemos unos pazguatos con las funciones han
dado sus frutos, has hecho de nosotros unos preuniversitarios, has hecho de mí
una experta, ha sí que sientete orgulloso de haber logrado tu labor.
Hermano Ángel Ramón, muchas gracias por compartir conmigo
sus conocimientos en Historia de España y por inspirarnos en Historia del Arte,
por dedicarle tanto tiempo a nuestros exámenes, a nuestros trabajos, la
infinidad de dudas…en definitiva, por compartir un poquito de usted con
nosotros. Carlos, que puedo decir que no sepas. Eres un maravilloso profesor de
inglés y de la vida. Cuantas anécdotas has podido compartir con tus niños.
Cuantos truquillos para acordarnos de cosas, como algunas citadas a lo largo de
mi relato. Por tratarme como lo has hecho, y apoyarme en todo momento. Cuando
sientes que confían en ti, es cuando confías en ti mismo. Por soportar mis
dudas de vocabulario, la entrega de miles de ejercicios y de redacciones a lo
largo de estas clases. Te agradezco tu empeño por querer sacar lo mejor de
nosotros mismos y demostrarnos a todos
que aquí nadie es menos que nadie.
A Doris, a pesar de mi torpeza con los autores, eres una
grandísima profesora y espero que nunca dejes de explicar también a Kant. Has
logrado que me interese por los antiguos pensadores y que incluso los utilice
para mis relatos. No dejes de ser como eres y no dejes que un alumno influya
negativamente en ti.
Y por último, y no menos importante. Toñi. Sin duda, has
sido la persona que más me ha soportado en este curso. A quien más cafés he
interrumpido o tan sólo a la que más redacciones he dedicado en este curso.
Espero que hayas disfrutado de ellas y hayas sacado el valor positivo de mi
pesadez. No quiero que tengas ningún mal recuerdo de mí, todo lo contrario,
para mi has sido una profesora diez. Y por ese motivo me gustaría que no
perdiésemos el contacto. Porque Toñi, tal vez una gran parte de mi sea como es
gracias a ti, me has hecho ser más trabajadora que en toda mi vida. Y desde
luego, he notado los magníficos resultados. Gracias por hacerme creer en mis
facultades.
Y por supuesto, Melchor, te agradezco las miles de bolitas
de anís que me has regalado este curso, las sonrisas mañaneras, los buenos días
y tu preocupación por mis dudas existenciales, tus valoraciones sobre mis
sugerencias, tu perspicacia. Todo aquello que me has ofrecido a lo largo de los
días, en Estambul, en el festival, en el cursillo de selectividad. Irradio
Felicidad Gracias a vosotros. Y María, mi consejera personal sobre tantas dudas
sobre la carrera, sobre la vida en sí misma, planificación, reflexiones…
gracias por gastar tantas horas en escuchar mis palabras. Algún día de esta
semana decidiré que carrera elegir.
…
Sé que es imposible hacer feliz a todo el mundo, y también
sé que no les soy de agrado a todos. Pero este curso ha sido increíble, porque
he conocido a muchísimas personas que antes tan solo eran conocidos de pasillo;
he ganado una cantidad de buenos amigos, de personas en las que realmente puedo
confiar. He ganado mucho más que una plaza en la Universidad. He ganado ser de
la promoción de 2013-2014 del Colegio Maravillas. Y sentirme orgullosa de ello.
Y espero que este relato conciencie a todos los partícipes
de él, de su valor, de que cada pequeña decisión nos afecta a todos. Porque
hoy, señores míos, he llegado al nivel de autorrealización
de Maslow.
María Sanjuanbenito 2ºA de Bachillerato
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